DE NUEVO AL TEATRO

El 13 de Octubre considerando  la programación del teatro Alameda, otro año más, los alumnos y alumnas de  Primaria del CEIP Azorín acudimos a darnos un paseo cultural por Sevilla. Como los tiempos no están para derroches, aunque el viaje no salió caro, y la cultura no es cara nunca,  planificamos el día al máximo.      

Jardín Americano

Teníamos la salida sobre las 8:15 h. aunque por causas ajenas a la voluntad de la mayoría de los participantes y, evidentemente por motivos justificados,  partimos sobre las 8:45. Los autobuses no llegaban y “alguien”,  por razones de  logística, necesidad de provisiones para echar el día,  pues  “de pan vive el hombre”; sufrimos un retraso de 30 minutos. Dicha contrariedad no restó intensidad a la jornada. Llegamos al Jardín Americano y nos esperaba nuestra Auxiliar de Conversación, Kirstie, y unos monitores muy documentados que nos enseñaron cómo árboles de tierras lejanas han llegado hasta nosotros y por qué. Dimos un paseo interesante por  la orilla del Guadalquivir, entre una suave brisa y el trinar de los pajarillos nuestros sentidos acusaron un agradable deleite. Descubrimos un lugar tan cercano, para disfrutar con la familia, como desconocido y mágico. 
  

Teatro Alameda

Tras desayunar nos acercamos al Teatro,… ¡fenomenal! Un grupo de artistas andaluces conjugando  literatura y  flamenco nos acercaron al fantástico mundo de “El Mago de Oz”. Consiguieron “engancharnos” de una manera extraordinaria, nos mostraron un mundo de valores tan importantes como la amistad, la confianza en sí mismo, la solidaridad,… El comportamiento de nuestros alumnos y alumnas merece  mención, porque comparado con los de otros colegios, los nuestros los mejores. 

Reposando la comida

Ya en el Alamillo, con unos 35ºC, y ni un banco dónde poder reposar… a la sombra, pues parecían que todos estaban en el lado contrario, nos sentamos en el suelo, con algún bocadillo accidentado, aunque carecía de importancia porque esas mochilas llevaban avituallamiento para una semana, por lo menos. Por si fuera poco no encontramos una  fuente cerca,   aunque tampoco importó porque la señora del quiosco hizo el agosto, agotó la reserva en botellas de agua y helados.

 No sentían cansancio, con ese calor asfixiante, con  el polvo que levantaban sus carreras y algunos con el chaleco puesto para no perderlo.  ¡Qué energía!

Jugando en el Alamillo

Y ¡por fin! El autobús con su aire acondicionado ¡qué bien! Ahora a relajarnos… pues no. Aún le quedaban ganas de cantar, de gritar, de molestar al compañero, ¡qué vitalidad! Es increíble. Pero en definitiva, fue un buen día.

Siempre jugando

Ahí va el reportaje completo.